LA PODOLOGÍA Y EL PODÓLOGO.

El Podólogo es el profesional dentro del campo sanitario que diagnostica y trata las diferentes alteraciones y enfermedades de los pies.

No hace muchos años, en 1956, se creó la primera escuela de Podología en la Facultad de Medicina de Barcelona, pero no fue hasta 1962 cuando se reconoció reglamentariamente la especialidad de Podología para los Practicantes y Ayudantes Técnicos Sanitarios.

En el año 1988 la Podología consigue su grado máximo pues se reglamenta como una Diplomatura independiente de los Ayudantes Técnicos Sanitarios creándose la primera Escuela Universitaria de Podología.

Por lo tanto, desde 1988 encontramos en el campo sanitario a un profesional dedicado única y exclusivamente al tratamiento de las afecciones y enfermedades existentes en el ámbito de los pies: el Podólogo. 

En la actualidad los estudios de podología son Grado universitario, como el resto de titulaciones sanitarias.

La Podología ha ampliado su actuación a diferentes campos para conseguir un mejor y más óptimo cuidado de los pies.

La Ortopodología
La Quiropodología
La Cirugía Podológica
La Biomecánica
La Podología pediátrica
La Podología geriátrica
La Podología deportiva
La Podología Física

La Ortopodología:

Area de la podología cuya finalidad es el tratamiento no quirúrgico de los trastornos biomecánicos de las extremidades inferiores, cuando el movimiento y la función del pie y el tobillo están fuera del rango de los límites normales. Problemas como metatarsalgias, talalgias, gonalgias, deformidades digitales, deformidades congenitas, lesiones deportivas, juanetes son susceptibles de solucionarse con tratamientos ortopodológicos. Las herramientas son los soportes plantares, ortesis de silicona y prótesis. 

La Quiropodología:

Dentro de esta área se incluyen los tratamientos quiropodológicos no cruentos de los pies causados por trastornos sistémicos, tales como diabetes, reumatoides, vasculares, uñas encarnadas, callosidades, verrugas, micosis, úlceras y curas especializadas para el complejo de la piel y la uña.

La Cirugía Podológica:

La Podología ha desarrollado técnicas específicas y precisas para solucionar muchos de los problemas de los pies tales como la patología ungueal, uñas encarnadas, patologías de partes blandas, verrugas, quistes y cirugía osteoarticular como juanetes, dedos en garra o martillo, aumentando la fiabilidad y la eficacia de la cirugía disminuyendo el tiempo de recuperación.

La Biomecánica:

El estudio de la marcha muestra cual es el grado de armonía de todo el aparato locomotor y las alteraciones que pueden presentar los pies en su deambulación. El análisis de la marcha también se utiliza para observar la eficacia de la recuperación quirúrgica. Además, también es importante para los pacientes diabéticos, dado que la detección precoz y la corrección de las áreas de elevada presión antes de que los síntomas aparezcan, pueden reducir el riesgo de úlceras y la futura amputación de la extremidad inferior.

La Podología pediátrica:

Los Podólogos proporcionan diagnóstico y tratamiento a los problemas de los pies de los niños,´es importante diferenciar la evolución normal del crecimiento de los niños a los transtornos patológicos. Pies valgos, marchas en intraversión, trastornos congénitos o hereditarios, o lesiones traumáticas. Si se identifican adecuadamente a una edad temprana, estos problemas pueden ser corregidos con prontitud.

La Podología geriátrica:

El paso del tiempo y las agresiones no corregidas hacen que los pies de la gente mayor requieran una adecuada atención para mantener una buena movilidad. Los pacientes mayores requieren valoración periódica y curas podológicas continuas debido a las complicaciones relacionadas con los trastornos crónicos tales como artritis, diabetes mellitus y trastornos vasculares periféricos. Tales complicaciones pueden afectar a la calidad de vida y a la independencia debido al dolor, posibles infecciones y movilidad reducida.

La Podología deportiva:

Los Podólogos utilizan una variedad de procedimientos para prevenir y/o tratar lesiones a los deportistas profesionales y aficionados, y para ayudar a optimizar el ejercicio mientras se minimizan las lesiones. 

La Podología Física:

La terapia incluye ultrasonidos, estimulación eléctrica o terapias de ejercicios tales como ejercicios isocinéticos diseñados para disminuir el dolor y la inflamación relacionados con los problemas biomecánicos.

Estudio pie diabético:

El trabajo multidisciplinar y la prevención son las pautas más importantes para minimizar los riesgos del pie diabético. Como es sabido, los problemas vasculares y neuropáticos afectan con más intensidad a los pies de las personas diabéticas, aumentando así el riesgo de padecer lesiones complicadas.

Se realizan estudios vasculares mediante doppler, índice maleolo/brazo, y estudios para valorar la sensibilidad neurológica del pie. Así mismo estudios biomecánicos para valorar los apoyos y adelantarnos a las posibles lesiones.

Alejandro Núñez. Colegiado 102

PODÓLOGOS

Deja tu comentario